Año: 2012
Duración: 113 min.
Director: Tim Burton
Guión: Seth Grahame-Smith (Personajes: Dan Curtis)
Reparto: Johnny Depp, Michelle Pfeiffer, Helena Bonham Carter, Eva Green, Jackie Earle Haley, Jonny Lee Miller, Chloë Grace Moretz, Bella Heathcote, Gulliver McGrath, Christopher Lee, Ray Shirley, Alice Cooper
Sinópsis:
En 1752, los Collins y su hijo Barnabas zarpan de Liverpool con destino a América para librarse de la misteriosa maldición que pesa sobre su familia. Con el paso de los años, Barnabas (Johnny Depp), un playboy impenitente, se convierte en un hombre rico y poderoso que comete el error de romperle el corazón a Angelique Bouchard (Eva Green). Pero ella, que es una bruja, lo condena a un destino peor que la muerte: lo convierte en vampiro y lo entierra vivo. Dos siglos después, en 1972, Barnabas consigue salir de su tumba y se encuentra con un mundo irreconocible. Adaptación de la serie de televisión creada por Dan Curtis en 1966, que tuvo un remake en 1991.
(FILMAFFINITY)
Trailer:
Opinión:
Como buena fan de Tim Burton esperaba con ganas este estreno, sobre todo después de la decepción que me supuso “su” versión de Alicia En El País De Las Maravillas, y digo “su”, entre comillas, porque realmente es una peli Disney, pero esa es otra opinión y otra historia.
Supongo que si hay algo que saber sobre este filme antes de verlo, es que se basa en la serie homónima de televisión, que Burton veía en su niñez/juventud, eso y que el reparto promete mucho, pero en eso se queda, promesas.
La película no está mal para pasar un par de horas entretenidas y siempre es un lujo ver la estética “Burtoniana” en la gran pantalla, pero, a parte de esto, poco más que decir que sea realmente relevante.
La historia, quizás, sí que hubiera necesitado un repaso para modernizarla un poco, o quizás fueran los personajes los que necesitaban una revisión y una actualización, ya que (aunque imagino que era la idea y la intención), aunque se mantiene la esencia sesentera de la serie en el largometraje, los personajes también lo hacen, y resultan poco creíbles y, a ratos, incluso un poco sobreactuados, así como poco aprovechados, puesto que considero que podrían haber dado muchísimo más juego (al menos algunos) si se le hubiera concedido más tiempo de metraje y un mejor guión adaptado, que respetase la esencia de la serie, pero que al mismo tiempo la modernizase y los personajes pudieran ser más siniestros, misteriosos, atrayentes y, en definitiva, mejorarse.
Para mi gusto, la actuación más floja ha sido, sin duda, la de Helena Bonham-Carter, que nos tiene, perdón, que me tiene acostumbrada a actuaciones mucho mejores, como Bellatrix Lestrange o Marla Singer. El doblaje que tuvo Chloë Grace Moretz (Hit Girl en Kick Ass) me pareció bastante inadecuado: Insípido y con una voz que pretendía ser sensual y que no cuadra con una quinceañera rebelde. Jackie Earle-Haley también decepciona un tanto, puesto que su personaje resulta un tanto insulso y sobrante.
Y aunque a todos los personajes se les puede encontrar alguna pega, no quiero decir más sin antes intentar ver algún capítulo de la serie y poder opinar mejor al respecto.
Así pues, un 7,3 un tanto pobre para este film que más que una sombra tenebrosa, se ha quedado en penumbra curiosa (por no decir graciosa).